Museo iconográfico del Quijote de Guanajuato

Museo iconográfico del Quijote de Guanajuato

Cuenta Eulalio Ferrer Rodríguez que cuando atravesó la frontera de Francia, después de la Guerra Civil, un miliciano cambiaba libros por cajetillas de tabaco. De dicho cambio Eulalio que había sido capitán del ejército republicano, el libro del Quijote le cambió la vida.

Exiliado en México desde 1941 fue un publicista y comunicador y empresario y escritor de éxito, eso le llevó a realizar una de las colecciones más importantes del mundo, en cuanto a pintura, dibujos, grabados, esculturas en relación al Quijote.

Fue fundado en Guanajuato, México, en 1987 donde se encuentran como hemos indicado no solo pinturas, esculturas, grabados, porcelanas, cerámicas, tapices y todo tipo de representaciones de la obra del Quijote. Fue inaugurado por Felipe González y Miguel de la Madrid. Ya en ese momento contaba con 538 piezas.

En dicha colección existen piezas de grandes artistas mexicanos y de Latinoamérica. También lienzos pincelados de escritores como José Hierro, Ernesto Sábato y Fernando del Paso.

– ¿Por qué las grandes obras maestras de la literatura y del arte, tienen un impacto sobre generaciones de seres humanos? ¿Por qué las convertimos en obras maestras, en obras clásicas, en obras geniales y su influencia, es siglo tras siglo, en personas de distintas sociedades, culturas, lenguas, ideologías, metafísicas, religiones…?

¿Qué tiene el Quijote, la Iliada, la Divina Comedia, el Mahabharata, Shakespeare y otras docenas de obras de literatura o del pensamiento o de la filosofía o del arte plástico o de la música para que como espejos volvamos a ellas generación tras generación…?

Posiblemente, este museo es el museo más importante del mundo, a nivel iconográfico, de imágenes del Quijote, de imágenes no virtuales, sino de imágenes reales, de obras de arte, como hemos indicado de arte plástico, en todos los géneros y estilos y soportes y técnicas.

Esa pareja de Quijote-Sancho, serían los dos seres humanos, que están dentro de cada persona. Somos ambas realidades al mismo tiempo, somos dos en uno o uno en dos. Quizás, el gran descubrimiento de Cervantes en el Quijote, o de la vida valiéndose de Cervantes y que plasmó en el Quijote, no solo son los grandes valores: libertad, conmiseración por el otro, análisis de la sociedad y todos los misterios y enigmas del ser humano. Del ser humano en general, del ser humano de su época y de su tiempo, del ser humano como él descendientes de judíos en su momento concreto, de Cervantes en sus avatares históricos y biográficos…

Decía que quizás Cervantes, dándose cuenta o no, consciente o no, expresó que el ser humano es una especie de unidad y de contradicción, de sustancia indivisible de cuerpo y alma y mente, por lo cual, diríamos que los trozos que lo forman y lo conforman están siempre luchando dentro de él, desde fuera hacia dentro de él mismo, desde dentro hacia fuera de si mismo…

Cada siglo se ha interpretado el Quijote, con una perspectiva diferente, diríamos que la historia va añadiendo o descubriendo nuevos sentidos, quizás, sea una “especie de gran ilusión colectiva”, percibimos una nube, y después, vamos viendo figuras diferentes. Quizás, una obra clásica o maestra o genial, es aquella, que tiene dentro, que es capaz de hacer ver a los hombres y mujeres, a verse y a ver el mundo de diferentes modos y maneras…

Quizás, el Quijote, haya de ser leído cada diez años, por cada persona. Porque así, cómo él o ella va cambiando de edad, iría percibiendo nuevos significados y significantes, nuevos contenidos y continentes…

Vivimos tiempos complejos, por un lado, la información que se consume, cada vez más es a través del audio y de sistemas audiovisuales, a través del sonido y de las imágenes fijas e imágenes en movimiento. Y cada vez, se leen menos, frases y conceptos y palabras, sentado en el sillón de cada micromundo. Por lo cual, las interpretaciones del mundo difieren.

Y después, después sucede también, que existe una enorme posibilidad de libros y de lecturas. Es más, a veces, pienso que leemos demasiado poco las grandes obras de la humanidad. O, si hiciésemos un canon de las quinientas obras literarias más importantes de todos los tiempos y culturas y macrovisiones, incluso entre los lectores empedernidos no las habrán leído y meditado y pensado lo suficiente. Y si añadimos a la lista las quinientas grandes obras de filosofía, y también las quinientas obras de metafísicas religiosas… Esas mil grandes obras de literatura y filosofía y metafísica religiosa son los pilares profundos de la humanidad. Sin negar la enorme importancia de la ciencia, la filosofía, las artes…

Para terminar, una invitación a la lectura de las cien grandes obras literarias y filosóficas y metafísicas de toda la humanidad, entre otras el Quijote, y también invitar a los equipos directivos de este museo iconográfico, que piensen entrar en la Red de Ciudades Cervantinas del mundo.

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