Este mes de Septiembre la Organización de Naciones Unidas celebró su anual Asamblea General, esta consiste en discursos de los Jefes de Estado, Gobierno o altos representantes de Misiones acreditadas ante dicha organización, para emitir un balance y perspectiva de actividades. La Santa Sede es un Estado Observador de Naciones Unidas desde el 6 de Abril de 1964, se ratificó en el 2004 por una resolución emitida por la Asamblea General, el pasado 25 de Septiembre la Misión Diplomática de La Santa Sede pronunció su discurso a través del Secretario de Relaciones Internacionales con otros Estados el Arzobispo Gallagher quien tuvo oportunidad previa de hablar en una entrevista con la cadena televisiva EWTN. En el discurso, hizo una especial mención de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que son diecisiete propuestos por la misma Asamblea en 2015, la situación humanitaria de los refugiados a nivel global,  el cual, el Papa Francisco ha pedido que se ponga a la persona en el centro de todo, también expresó la preocupación de la Iglesia por la situación Venezolana.

Los ODS representan un tema muy importante para La Santa Sede, el Papa Francisco considera que dichos objetivos representan un importante signo de esperanza. Considero también importante que se haya mencionado en el discurso a la encíclica Laudato Si la cual hace un importante llamado a la preservación y reflexión en el tema del cambio climático, tema que también ocupó mucha importancia en la gran mayoría de discursos mencionados en la Asamblea General.

La Santa Sede trabaja en la prevención de conflictos armados globales a través de la negociación internacional, los oficios diplomáticos lo cual me parece muy importante, ojalá- son mis deseos- que dentro de Naciones Unidas la Iglesia pueda tener una mejor participación en importantes Acuerdos Internacionales en pro de la paz, cambio climático, reducción de la pobreza, seguridad internacional.