El candidato presidencial afgano Abdullah Abdullah se adjudicó el lunes la victoria en las prolongadas elecciones presidenciales y también dijo que el proceso político de formación de un gobierno de unidad nacional entró en un punto muerto.
“El fraude cometido en el proceso electoral ha llevado a un punto muerto. Yo hubiera continuado defendiendo el derecho del pueblo y de los sufragios que él ha emitido y nunca hubiera aceptado los resultados electorales manchados por el fraude” dijo Abdullah en una reunión pública, frente a centenares de sus partidarios.
La elección presidencial de Afganistán tuvo lugar el 5 de abril y como ninguno de los ocho competidores obtuvo más del 50 por ciento de los votos, los dos que iban a la cabeza, Abdullah Abdullah y Ashraf Ghani Ahmadzai fueron al desempate el 14 de junio. Abdullah, quien cosechó la mayoría de los votos en la primera ronda de las elecciones y quedó segundo en el desempate, ha acusado a la comisión electoral de cometer fraude a favor de Ghani Ahmadzai y exigió una auditoría de los votos.
Sin embargo, Noor Mohammad Noor, el portavoz de la comisión electoral, dijo el viernes que la auditoría de los votos y el proceso de recuento fueron completados el jueves y los resultados serían anunciados en pocos días.
Entre tanto, Abdullah insistió el lunes en que él resulta ganador de las elecciones presidenciales, si el voto genuino es separado del voto falso. “En base a los votos genuinos, emitidos en el proceso electoral, yo soy el ganador” dijo Abdullah, agregando que una elección transparente y justa es la base para la paz duradera y la estabilidad en Afganistán.
Abdullah dijo que él está en contra de la violencia, pero defendería en una manera civilizada su derecho y el derecho de quienes votaron a su favor. El aspirante a presidente Abdullah también agregó que las conversaciones políticas con su oponente, Ashraf Ghani Ahmadzai, para la formación de un gobierno de unidad nacional, se hacen por los intereses del país.
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