El gobierno Armenio manifestó después de la reunión celebrada entre el primer ministro Tigran Sargsyan  y el embajador Iraní para Armenia Mohammed Reisi que la 12° sesión de la comisión intergubernamental entre Armenia e Irán se llevará a cabo en Teherán más tarde este año.

El gobierno expresó que el período ordinario de sesiones se enfocará en los procedimientos para expandir la cooperación en tanto bilateral como multilateral.  

Se ha dicho que Tigran Sargsyan ha extendido sus felicitaciones en relación con su feriado nacional – el 35° aniversario de la Revolución Islámica, que se celebra el 11 de febrero – al embajador y al amistoso pueblo Iraní

“Las sesiones nos ayudan a expandir la amistad entre los dos pueblos, y debemos implementar constantemente programas en forma conjunta“, manifestó el primer ministro en un comunicado de prensa.

El embajador manifestó que el desarrollo de la cooperación con Armenia es una de las prioridades de la política extranjera de Irán y que Teherán está preparado para expandir tanto la sociedad bilateral como la multilateral con Armenia en varios sectores, particularmente, en el sector energético.

Según versiones, ambas partes han mantenido conversaciones sobre una amplia gama de temas en los campos de la energía, turismo y desarrollo de infraestructura, incluyendo la marcha de la construcción de la planta de energía hidroeléctrica de Meghri y la tercera línea de transmisión para Irán y Armenia, con el objeto de hacer canjes de electricidad estacional y también algunos detalles relacionados con la construcción del oleoducto y del ferrocarril Irán – Armenia.

Tigran Sargsyan recibió una invitación para ir a Irán en representación del primer vice-presidente Eskhad Jahangiri, dijo el gobierno.

Según la agencia de noticias Armenia Aysor, Rouhani el Presidente Iraní recientemente electo visitará Armenia en un futuro cercano.

Irán ha fomentado vínculos más estrechos con Armenia desde la proclamación de la independencia de Yerevan después de la caída de la Unión Soviética. Teherán utiliza las buenas relaciones existentes entre Irán y Armenia como una contra la República de Azerbaiyán, un país situado al norte que había tomado un rumbo pro-occidental y mantiene vínculos estrechos con Israel, a pesar de ser un país de mayoría Shiita.

Además, Irán tiene una minoría étnica Azerbaiyaní de 25 millones, una población que excede ampliamente a sus hermanos Azerbaiyaní en la República de Azerbaiyán independiente. El liderazgo en Irán considera esta situación como una amenaza potencial a la seguridad de Irán como estado.  Esta es una de las razones por las cuales Teherán había ayudado a Armenia con suministros de petróleo y gas, y supuestamente también con armas durante la guerra de Nagorno-Karabakh entre Armenia y Azerbaiyán.

Teherán ha presionado en reiteradas oportunidades a Azerbaiyán para que se fomenten vínculos más estrechos con Israel y los Estados Unidos y manifestó expresamente “dudas” sobre la soberanía de Azerbaiyán al manifestar que “Azerbaiyán es un terreno Iraní histórico, denominado Arrán”.