El presidente sirio Bashar al-Assad dijo el domingo que su administración atacará los puntos “terroristas” clave, luego de restaurar la seguridad y la estabilidad en las zonas principales del país, de acuerdo con la agencia oficial de noticias SANA.

Assad dijo que Siria va a lidiar primero con las regiones “que han sido golpeadas por el terrorismo” y más tarde se concentrará en atacar otras regiones, que están controladas por fuerzas rebeldes.

La crisis siria, que ya lleva tres años, ha alcanzado un punto de inflexión, gracias a las victorias militares sirias contra el “terrorismo”, así como también a las reuniones de reconciliación nacional, dijo él.

El presidente hizo estos comentarios al tiempo que las tropas sirias han obtenido avances en sus batallas contra los rebeldes en varios frentes, principalmente en Siria central y del sur. El domingo SANA dijo que el ejército llevó a cabo “operaciones exitosas” contra grupos de milicianos armados a lo largo del país, matando a decenas de presuntos milicianos y destruyendo su armamento.

También dijo que el domingo el ejército retomó el control total de las montañas orientales que dan sobre la ciudad de Rankous, al norte de la capital, Damasco. La ciudad ha sido recientemente recapturada por las tropas sirias.

La crisis siria comenzó con protestas antigubernamentales en una cantidad de ciudades y suburbios sirios en el 2011, pero rápidamente evolucionó hacia una sangrienta guerra civil, a la que se sumaron grupos yihadistas extranjeros, incluyendo filiales de Al Qaeda.

El gobierno sirio ha dicho repetidamente que la crisis está alimentada en gran parte por una conspiración apoyada desde el extranjero, acusando a países occidentales y de la región de apoyar al movimiento anti-Assad. Desde que comenzó el conflicto más de 150.000 personas han sido muertas y millones fueron desplazadas en Siria.