Médicos Sin Fronteras (MSF), un grupo de ayuda sanitaria, ha anunciado que a partir de diciembre, en tres de sus centros de tratamiento del Ébola en África Occidental, se iniciarán ensayos clínicos de drogas contra el virus del Ébola.

En una declaración emitida el jueves, MSF dijo que los diferentes estudios los realizarán varios asociados internacionales en esta investigación, que apunta a identificar un tratamiento efectivo del virus, el cual hasta ahora ha causado la muerte de más de 5,000 personas en la región de África Occidental.

El Instituto Francés para la Salud y la Investigación Médica realizarán ensayos clínicos sobre el “antiviral favipiravir” en la región de Gueckedou de Guinea. El Instituto de Medicina Tropical de Amberes realizará un segundo estudio en Conakry, usando terapias de sangre y plasma, derivados de los anticuerpos de pacientes curados del Ébola.

La Universidad de Oxford realizará el tercer estudio, en un centro aún a determinar, en nombre del Consorcio Internacional de Infecciones Respiratorias Agudas y Emergentes. El estudio observará la eficacia de la droga antiviral brincidofovir y sera financiado por Wellcome Trust.

La Organización Mundual de la Salud (OMS), y las autoridades sanitarias de los países afectados, participarán en los esfuerzos colectivos. “Esta es una asociación internacional sin precedentes que representa la esperanza de que los pacientes finalmente reciban un tratamiento real contra esta enfermedad, que mata del 50 al 80 por ciento de las personas infectadas” dijo en una declaración Annick Antierens, de MSF.

Las dos drogas, brincidofovir y favipiravir, han sido elegidas por la OMS de la lista de drogas potenciales contra el Ébola, luego de una cuidadosa examinación de su eficacia, disponibilidad de los productos y la facilidad con que estos puedan ser administrados a los pacientes.

“Nosotros debemos recordar que no hay garantía de que las terapias vayan a ser tratamientos milagrosos” explicó Antierens.

En Guinea, las estadísticas más recientes mostraron que 1.919 personas han sido infectadas con el virus del Ébola, de las cuales 1.166 han muerto.