El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha adoptado una nueva resolución instando a Siria a permitir que una Comisión Investigadora continúe su trabajo documentando las violaciones y abusos a los Derechos Humanos cometidos por todas las partes que intervinieron en el conflicto del país.
La resolución fue adoptada el viernes por seis votos en contra y 29 votos a favor, luego de que fuera presentada por el Reino Unido, y patrocinada por Francia, Alemania, Italia, Jordania, Kuwait, Marruecos, Qatar, Arabia Saudita, Turquía, el Reino Unido y los EE.UU.
La resolución renovará el mandato de la Comisión de Investigación por otros 12 meses, dijeron los once países patrocinadores en una declaración conjunta. La resolución expresó que la investigación examinará los ataques indiscriminados y el hecho de que se haga blanco deliberadamente en civiles protegidos, lo cual contraviene a la ley internacional.
Se expresó que la crisis en Siria continúa teniendo un impacto devastador sobre los civiles, agregando: “A hombres, mujeres y niños se les niegan sus derechos humanos, día tras día”. “El gobierno de Assad, el así llamado Estado Islámico de Iraq y el Levante, y los combatientes extranjeros, deben detener el derramamiento de sangre”.
El ministro de la Oficina del Exterior y de la Comunidad de Naciones del gobierno del Reino Unido, Tobias Ellowood, celebró la resolución del Consejo de Derechos Humanos condenando la situación en Siria.
Ellowood dijo: “El régimen de Assad eligió usar el miedo y la violencia para reprimir las protestas democráticas y los llamados a favor de las libertades individuales”. El Reino Unido dijo en una declaración que en Siria había “más de 220.000 muertos, 12.2 millones en terrible necesidad de asistencia, 7.6 millones desplazados internamente y 3.9 millones de refugiados en la región”.
Asimismo señaló: “Esta resolución condena el uso de bombas de barril, de armas químicas, de la hambruna como método de hacer la guerra, de la tortura y otros actos despreciables, mandando una clara señal de la comunidad internacional a Assad y a los grupos extremistas, de que sus acciones no serán olvidadas y que no quedarán sin consecuencias”.
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