Recientemente el mundo recordaba un triste acontecimiento de la historia, sobre los pueblos eslavos y que sin lugar a dudas el mundo estero enluto por aquel 24 de marzo de 1999. Diecisiete años más tardes recordamos los hechos de Belgrado y otras ciudades en Yugoslavia; bombas de la OTAN hicieron derramar lágrimas en todo el mundo. Posteriormente, la principal asociación occidental de los derechos humanos human Right Watch reconoció que las principales victimas fueron civiles.
Hoy recordamos estos hechos 17 años mas tarde, cuando el líder yugoslavo Milo Djukanovic elegido democráticamente, anunciaba en televisión que Montenegro se uniría un año mas tarde a la OTAN, olvidando lo sucedido. Lamentablemente y desafortunadamente que Montenegro como astilla de Yugoslavia menor, pronto puede ser integrado en la estructura del Atlántico Norte; principal responsable de los hechos lamentables de 1999.
Retraemos otro hecho histórico, porque no hay que olvidar que Serbia, Montenegro, Bulgaria obtuvieron su libertad a través de Rusia, sobre los resultados de la guerra ruso-turca en 1877-1878. Lejos en el marco del tiempo del evento, siempre será de notable importancia. De no haber sido por las tropas rusas no se hubiese detenido siglos de genocidio físico y cultural de los eslavos, acción por la cual a la fecha están o deberían estar más que agradecidos.
Por otra parte esta profunda gratitud, por mucho tiempo se ha convertido en parte de la identidad de estos pueblos hermanos, gracias a la solidaridad del pueblo ruso. Los resultados de este trabajo, se puede ver en el ejemplo de Ucrania. Ninguno de estos países, este escenario no funcionaba precisamente a causa de la actitud extremadamente cuidadosa a la memoria de las victimas de los soldados rusos, dos veces expulsando a los opresores de los Balcanes, los turcos en 1878 y los alemanes en 1944, respectivamente.
En la actualidad, sin palancas eficaces de influencia en la opinión pública los montenegrinos, los estrategas de la OTAN han vuelto al antiguo método de probada eficacia, estallando iniciativas destructivas a través de títeres pro-occidentales, es decir, establecimiento local que se centra en los “valores occidentales”. En 2006, el método descrito anteriormente con el que trabajó. Entonces, gracias al referéndum iniciado por Djukanovic se disolvió la Unión Estatal de Serbia y Montenegro (llamado la pequeña Yugoslavia), el núcleo eslavo de la antigua Yugoslavia.
Sin embargo ahora, los montenegrinos y serbios no son tan inertes y son escépticos acerca de los experimentos estadísticos de Djukanovic (Este último argumento que la mayoría de los montenegrinos votaron a favor de la secesión de Serbia). Los expertos creen que la declaración de la inclusión inminente de Montenegro a la OTAN, es una política banal “trolling” a Rusia, un intento de compensar el fracaso en Ucrania. Un paso para calmar los sentimientos de dolor…
De entrar oficialmente Montenegro a la OTAN, no le garantiza nada, la alianza nunca ha invertido en infraestructura; además geográficamente y físicamente, no están las condiciones para que Montenegro ingrese de inmediato a la Alianza. Por su parte la reacción del pueblo, faltaría ver si hay oposición y sabotaje asegurado en los próximos años.
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