Entre el 27-30 de marzo, 2014, Carlos Fernández Valdovinos, el Presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), hizo una presentación sobre Paraguay, por primera vez, en la 55° Reunión Anual de la Asamblea de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y de la Corporación Interamericana de Inversiones (CII) en Bahía, Brasil, dicha reunión fue organizado por el JP Morgan, un banco de prestigio internacional.
En esta ocasión el Presidente Valdovinos, presento los objetivos de política y las perspectivas de la economía paraguaya, en igual manera hizo una reseña de la solida situación macro-económica del Paraguay, con el objetivo para manejar las nuevas tendencias de la economía global.
Según el Diario Economía Virtual, en dicho evento, “el titular del BCP expuso acerca de los desafíos en el nuevo contexto internacional, ante los cuales el Paraguay se encuentra preparado gracias al marco de políticas y fundamentos económicos que goza.”
Además Valdovinos puso el énfasis a la importancia de los fundamentos macroeconómicos para el mediano y largo plazo, “como prerrequisito para extender el horizonte de planificación de los agentes económicos y así atraer inversiones que generan empleo, producción e ingreso.” [1]
En esta conferencia asistieron más de 70 personas, entre los que se destacan son altos representantes de bancos centrales de varios países, instituciones financieras privadas y de desarrollo, Banco Central del Perú, BNDES, Itau, Bradesco, Santander, BBVA, Bancomer. Los fondos de inversión: Goldman Sachs, JPMorgan, Fidelity, Gavea, Kapitalo, Newton, Stone Harbor, Ventor.
La conferencia de JP Morgan conto con la presencia de las autoridades de los siguientes fondos: ING, BBM Investimentos, Bluebay, CSHG, Daiwa, Garde, Lazard, Jyske, Acadiam, Investec; y calificadoras de riesgo, Fitch Ratings, Standard and Poor´s.
El bajo crecimiento económico de Brasil y la deterioración de la economía en Argentina, en los últimos años, no ha afectado gravemente a la economía del Paraguay. En realidad Asunción ha tenido un crecimiento de 13 por ciento en 2013, aumento de reservas, acumuladas en los últimos años, y una solida y digna postura en el fondo externo neto soberano.
El Presidente Fernández Valdovinos elaboro en detalles sobre los objetivos de la política económica del gobierno y se analizaron las recientes reformas legales: Ley de Responsabilidad Fiscal, Ley de la Alianza Publico-Privada, La participación del Paraguay en la Alianza del Pacifico, Ley de Modernización de la Administración Financiera y la Ley del Nuevo Régimen Tributario.
El presidente de BCP asistió en el lanzamiento del “Grupo de Estabilidad Financiera y Desarrollo”, integrado por siete bancos centrales de la región (Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay, Perú, Uruguay) y el BID. Según los expertos del BCP “este grupo aspira a construir una agenda común de investigación, difusión del conocimiento y mejores prácticas a través de una cooperación técnica que permita ayudar en las responsabilidades específicas de los bancos centrales del sur del continente.”
El Presidente Valdovinos, tuvo reuniones bilaterales muy fructíferas con las calificadoras de riesgo Standard & Poor’s, Moody’s y DBRS; y con los bancos de inversión: JP Morgan, Bank of América Merrill Lynch, Credit Suisse y BNP Paribas. Todas las instituciones financieras demostraron un gran interés en seguir adelante y explorar aún más las posibilidades de invertir en la República del Paraguay. Asunción, bajo la gestión del Presidente Horacio Cartes, tiene un prestigio, ha mejorado significativamente la imagen país en el exterior y sobre todo tiene perspectivas y actualidad económica propicia para atraer inversión extranjera directa en el sector financiero y bancario.
Según la Agencia de Información Paraguaya, “la agencia calificadora Fitch Ratings observa que, tras la revisión anual de la calificación de Paraguay, la perspectiva pasa de ser de BB- “estable a positiva”, debido principalmente a factores claves tenidos en cuenta, como el crecimiento del PIB real a 13,6% en el 2013, el más mayor entre los países calificados por Fitch, sin ejercer presión sobre la inflación; el dinamismo entre la agricultura y el sector no agrícola (que registró una tasa de expansión del 7,7%) que ha mejorado la diversificación económica y mitigó la volatilidad del producto en el sector primario.” [2]
Fuentes:
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