El lunes en Beijing, el ministro chino de Defensa, Chang Wanquan, mantuvo conversaciones con el ministro iraní de Defensa y Logística de las Fuerzas Armadas, Hossein Dehqan. Chang dijo que el desarrollo de las relaciones bilaterales sigue siendo positivo y constante, registrando frecuentes intercambios de alto nivel y una confianza política mutua más profunda.

Habiendo sido testigo de la creciente cantidad de visitas mutuas y de la cooperación en el entrenamiento del personal entre las fuerzas armadas, Chang dijo  estar confiado de que las relaciones amistosas entre ambos países, así como de las fuerzas armadas, serán fortalecidas. Esta es la primera visita de Dehqan a China desde que asumió el cargo; él expresó la esperanza de que los dos países continuarán jugando un rol positivo en la salvaguardia de la paz y la estabilidad regionales.

Dehqan arribó a Beijing el domingo por invitación de Chang, comenzando una visita oficial de cuatro días a China.

También se informó que el domingo Irán realizó exitosamente un disparo de prueba de un sistema de defensa aérea capaz de destruir diferentes tipos de modernos aviones de combate o aeronaves no tripuladas, informaron los medios de prensa locales.

Durante la prueba, llevada a cabo en la base de defensa aérea de Khatam al-Anbiya, el sistema de misiles para altitud mediana dio exitosamente en el blanco, alcanzando un vehículo aéreo no tripulado con un misil de fabricación nacional, informó la agencia de noticias semi-oficial Fars, citando al comandante de la base, brigadier general Farzad Esmaili.

“El Mersad es un sistema misilístico de defensa para altitud mediana, que tiene más y mejores capacidades en la intercepción de blancos, guerra electrónica y también su radar cubre áreas más amplias y lejanas, comprado con sus rivales extranjeros,” dijo Esmaili.

A pesar de las preocupaciones de países occidentales sobre los avances del programa misilístico de Teherán, la república  islámica dijo que sus logros militares sólo serán utilizados con propósitos defensivos.