La televisión programada tiene los días contados. Los espectadores están dejando de lado la televisión que ya viene programada, con sus contenidos prefijados y establecidos en un horario, para dejar paso al vídeo bajo demanda y a los contenidos online sin limitación de horario.

En un informe publicado por Jim Nail de Forrester, (en la imagen) en el que han tomado como muestra a 4.709 personas de Estados Unidos, se ha  comprobado que sólo el 46% de esta muestra, situada entre los 18 y los 88 años, ve alguna vez al mes la televisión programada. Estos datos se explican debido al auge de plataformas como Netflix y plataformas de vídeo bajo demanda, programación que se descarga y se visiona cuando se desea.

Si separamos a los millennials, comprendidos entre los 18 y los 34, y los usuarios de 35 a 58 años, el 55% de éstos ve la televisión programada durante más de 4 horas a la semana, aunque la televisión online se está acercando mucho a estas cifras. Al mismo tiempo los mayores de 35 años todavía prefieren ver los contenidos en la televisión programada, con un 73% de los encuestados viendo este tipo de programación durante 4 horas o más a la semana.

Pero la televisión online tiene un punto a favor, y es que podemos ver los contenidos en cualquier dispositivo y, además, podemos ver contenidos que ya no se emiten en televisión, como temporadas pasadas de series que queremos ver o capítulos que nos hemos perdido en su día. “Las cadenas están empezando a usar pequeños clips de sus programas para promocionarlas. Pero esto es sólo una parte del potencial de estos clips. Estos medios conocen el poder de este tipo de vídeos para hacer que el número de fans de los programas crezcan, además también dan visitas al canal de YouTube de la cadena”, ha comentado Jim Nail, de Forrester.

Las cadenas están poniendo todo el empeño en evitar que los espectadores cambien el hábito y pasen a la televisión online ya que se perdería audiencia, fundamental para la programación de las campañas publicitarias.