La televisión comete graves errores con mucha frecuencia. Pero en la larga lista de los agravios de la pequeña pantalla, ¿cuáles son los que más enfadan al consumidor? Para responder a esta pregunta, la empresa de investigación de mercados TNS Emnid, ha entrevistado a unos mil telespectadores alemanes y ha indagado en las faltas más imperdonables de la televisión. Los bloques publicitarios interminables es la falta grave que más echan en cara los espectadores a las cadenas de televisión. El 86% asevera sentirse contrariado por los bloques de publicidad, especialmente largos.

La segunda plaza en el top 10 de las faltas televisivas se encuentran los programas aburridos. El 72% se queja de que muchos programas televisivos le provocan somnolencia.

El exceso de programas televisivos de “castings” pone también enfadados al 71% de los telespectadores. El 70% lamenta que muchos programas televisivos de calidad se emitan demasiado tarde. Sería conveniente adelantar el “prime time”.

Es menor la proporción de espectadores, un 57%, que se quejan de un exceso de violencia en la pequeña pantalla. Al 56% de los espectadores lo que verdaderamente les molesta es el uso que hacen, muchos famosos, de la televisión con fines promocionales.

Por otra parte, el 55% considera imperdonable que formatos televisivos muy similares entre sí se emitan simultáneamente en los distintos canales de televisión. El 53% se queja del excesivo protagonismo de los denominados ‘docusoaps’ en las parrillas televisivas, mientras que el 51% lamenta que los invitados a los programas televisivos sean casi siempre los mismos.

El top 10 de las faltas televisivas lo completa el exceso de programas relacionados con el mundo de la cocina. El 47% de los telespectadores acusa de irritante esta nueva “moda” televisiva. Sin embargo “MasterChef”, emitido por TVE-1, fué uno de los programas de más audiencia, de modo especial, en la gala final.

“La televisión ha acabado con el cine, el teatro, las tertulias y la lectura. Ahora tantos canales terminan con la unidad familiar”, afirma Bernice Ubres. Por otra parte, “la televisión es la violación de las multitudes”, afirma Jean Renoir.