Uno de cada cinco bebés prematuros termina sufriendo serios problemas de comportamiento que afectan sus vidas cotidianas, mostró el lunes una nueva tesis de la Universidad de Lund, en el sur de Suecia.

El estudio, que fundamenta la tesis, rastrea el desarrollo de unos 400 bebés prematuros y ha encontrado que entre aquellos que nacieron antes de la semana 28 del embarazo, el 20 por ciento evidenció serios problemas de comportamiento a partir de los dos años y medio de edad.

Johanna Mansson, la investigadora a cargo de este estudio le dijo a la Radio Sueca que: “Estos niños son socialmente más introvertidos y más ansiosos, y tienen significativos déficit de atención”.

Aproximadamente un tercio de los niños en el estudio estuvieron muy por debajo de los niveles de capacidad cognitiva esperados, es decir, que ellos tuvieron problemas con la memoria, la lógica y la correlación.

Se consideró que un total de 6 por ciento de los niños tenían problemas cognitivos permanentes. Como grupo, los extremadamente prematuros también se desempeñaron peor que los niños nacidos a término, en cuanto a cognición, lenguaje y capacidades motrices.

Además, los resultados indican que el nacimiento prematuro puede tener un efecto más negativo en los niños, que en las niñas.

La tesis de la Universidad de Lund es parte de un estudio nacional llamado Express, uno los estudios más grandes sobre niños extremadamente prematuros.