El gobierno keniano dijo el sábado que ellos han reforzado la seguridad en el problemático condado de Lamu, luego de que hombres armados desconocidos asaltaron nuevamente la aldea Pandanguo en Witu y aterrorizaron a sus residentes el sábado por la noche.

De acuerdo con la policía, una banda rompió varias puertas y se llevó productos de granja en la vasta zona selvática de Boni, en la región costera.

Otra banda secuestró un camión que estaba transportando alimentos dentro del área Hindi y robó todos los productos.

El comisionado del condado, Miiri Njenga, confirmó el domingo los recientes ataques realizados por hombres armados y los acusó por la matanza en junio de más de 60 personas y el desplazamiento de otros centenares.

El confirmó que hombres fuertemente armados sembraron el terror entre los residentes por espacio de varias horas, antes de incendiar casas y una escuela, así como también de vandalizar un dispensario local, del cual ellos se llevaron suministros médicos.

“Nosotros tenemos reportes de que los hombres armados tiraron al aire para asustar a los residentes antes de invadir la famosa granja Jima, robarse los productos de granja y escapar a la foresta.

Njenga niega aseveraciones según las cuales las agencias de seguridad fueron arrolladas por los atacantes, quienes siguen llevando a cabo nuevos ataques.

El dijo que el gobierno ha desplegado fuerzas especiales de élite en la foresta de Boni, para desalojar a la fuertemente armada milicia, que ellos piensan se encuentra detrás de la serie de ataques en el condado de Lamu.

“Las fuerzas armadas están rastrillando la tupida foresta de Boni, donde se cree que están escondidos los fuertemente armados asaltantes”, dijo Njenga. Los residentes dijeron que los atacantes estaban exigiendo conocer la ubicación y las operaciones de las fuerzas de seguridad, que fueron desplegadas en la región.

Inicialmente los ataques comenzaron en Mpeketoni, luego se extendieron a Witu, Kibaoni, Mukoe, siendo el más reciente blanco la aldea Pandanguo. El ataque se produce luego de que esa misma banda irrumpió en la misma aldea de Pandanguo, incendió dos salones de clases de una escuela primaria, un complejo administrativo y una tienda de alimentos en Pandanguo.