El 2 de abril 2014, el equipo periodístico del Diario Semanal Primera Plana, escribió el siguiente análisis sobre la pésima situación de infraestructura y alto nivel de corrupción en la ciudad esteña, que la ciudad con el nivel de comercio más alto en todo el Paraguay. Este análisis destaca la necesidad urgente de Ciudad del Este de tener un nuevo plan urbanístico que se tenía que desarrollarse diez años atrás.
“Qué paso del tan publicitado “reordenamiento urbanístico” de Ciudad del Este, proyecto que con bombo y platillo había sido lanzado por un grupo de empresarios locales, con apoyo de las autoridades paranaenses.
Más allá de una cuestión mediática, ya pasó más de tres meses de aquella rimbombante presentación, con la presencia del presidente de la República, Horacio Cartes, pero hasta la fecha no se ha puesto en marcha en terreno el ambicioso plan.
No obstante, el proyectista brasileño de origen japonés, Cassio Taninguchi, ex – intendente de Curitiba, ya recibió un importante porcentaje de los 490 mil dólares, monto que demandó la elaboración del proyecto, para la planificación urbanística de la capital del Alto Paraná. El dinero es puesto por empresarios de la zona, sin que ninguna institución estatal aporte una sola moneda.
Pero la gran duda radica en que este ambicioso plan, que trataría de lavar la cara del segundo municipio de la República, aparentemente tenga un trasfondo político, cuyo ideólogo sería el clan Zacarías, que se mimetiza entre los aportantes, para tratar así de desviar la atención de la ciudadanía y evitar que se generen más cuestionamientos de los que ya existen.
Ciudad del Este es una ciudad que ya debería estar codeándose con las grandes metrópolis del mundo. Sin embargo, la falta de voluntad política de sus autoridades, sumado al poco patriotismo y nacionalismo, hizo que este distrito fronterizo se encuentre estancando y hasta se podría decir, abandonado.
Hoy la otrora capital mercantil del Paraguay experimenta una terrible recesión económica, de la que no puede zafarse, porque no encuentra la panacea adecuada para superar la crisis. El gobierno de Horacio Cartes tomó como una agenda país la problemática de Ciudad del Este, sin que tampoco hasta la fecha aparezca la receta mágica, para recuperar la vivacidad comercial y económica de años atrás.
Los sucesivos gobiernos, las autoridades regionales, como el sector empresarial fronterizo, nunca priorizaron ni se importaron con la problemática y devenir de una de las ciudades que mayor aporta al fisco, en término de recaudación Pero fue ignorada por sus propios pobladores, que en su mayoría se enriqueció a costa de la capital alto paranaense.
Por todos estos antecedentes, el plan regulador que buscará revertir el actual estado urbanístico de Ciudad del Este no debe tener contaminación política, porque de lo contrario terminará siendo un fracaso, como ya ocurrió con varios otros proyectos, en los cuales el trasfondo era totalmente otra cosa.
Hoy la capital del Alto Paraná está manejada por un grupo apátrida, al que solo le interesa su beneficio personal, y no lo colectivo, como debería ser, para lograr el crecimiento y desarrollo sostenido de esta localidad fronteriza, cuyo presente y futuro está muy comprometido, porque no se observa ni una luz al final del túnel. Al contrario, cada vez se observa más oscuridad en el horizonte.
La coordinadora de este plan urbanístico, Nathalia Ramírez Chang, dejó entrever mucha desprolijidad y trabas para la ejecución del proyecto. A esto se suma los cuestionamientos y críticas que recibe el grupo de empresarios que lidera el ambicioso proyecto. La duda gira en torno a que los mismos estarían respondiendo al clan Zacarías, con un claro fin político. Esto, tomando en cuenta los antecedentes de este grupo de poder municipal, que viene esquilmando casi todos los intereses del pueblo. Los antecedentes no son de los mejores, por tanto la ciudadanía debe estar vigilante, para que este “reordenamiento urbanístico” no sea otro gran fiasco.”
Fuente: http://www.diarioprimeraplana.
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