Es especialista en comunicación política, se destaca por entrenar en oratoria, escribir discursos y por el manejo de crisis.
Un día normal para Geovanny Vicente Romero empieza leyendo la prensa local de la Capital de los Estados Unidos, Washington DC. Después pasa revista a los principales acontecimientos políticos en los países latinoamericanos, especialmente aquellos donde ejerce la consultoría política. Luego de la actualización diaria, si la musa despierta con fuerza surgirá la columna semanal que publica en periódicos como el Diario La Prensa (Diario NY); La Opinión, Los Ángeles; La Prensa Gráfica, El Salvador; El Nuevo Día, Puerto Rico; Siglo 21, Guatemala; y TeleSUR, donde escribe sobre comunicación política, desarrollo sostenible y gobernanza. Igualmente ha escrito para el diario más grande de México, EL Universal.
Vicente Romero ya ha sido consultor a nivel local, parlamentario y presidencial. Ha asesorado tanto en su natal República Dominicana como en países tales como El Salvador, Chile, Puerto Rico, entre otros.
El profesor como prefieren llamarle algunos a raíz de su experiencia en la academia tanto en el nivel de grado como de postgrado, también es comentarista político en medios como BBC y ha recibido múltiples premios por su trayectoria, entre ellos el reconocimiento del gobierno dominicano a través del Ministerio de la Juventud.
A continuación, Geovanny Vicente Romero nos explica algunos de los principales desafíos a la hora de asesorar a un político o candidato:
La pregunta que no puede faltar, ¿cómo se ganan las elecciones?
Considero que si diera una respuesta única a esta interrogante estaría cometiendo un gravísimo error, uno imperdonable. Pienso que requiere de horas de trabajo, alma, corazón y mente. Por supuesto, las emociones también son importantes, lograr que esas emociones despierten en la audiencia target, así como lograr ese clic con el electorado a través de la empatía que el candidato despierta en ellos, es crucial y de no hacerlo le pasa una factura grande al final de la contienda.
La verdad es que no hay una fórmula mágica, quien diga lo contrario esta mintiendo, es un complemento de todo porque la respuesta a esta pregunta va a depender de la forma en que evolucionan las sociedades. Es una dialéctica que crea una dinámica constante y cada país, provincia o municipio tiene una idiosincrasia distinta y no puedes venirle con una receta prefabricada, al contrario, requiere mucho estudio y la aplicación de la neurociencia para ver los patrones de comportamientos de tu electorado.
Cuáles son los principales retos a la hora de asesorar a un político o candidato:
Controlar los propios fantasmas del político, esos miedos que le atormentan y evitan que logre un desempeño óptimo, que logren su mejor versión, aquí obligatoriamente entra el coaching político. Esta es una pregunta interesante, porque envuelve muchos factores. Por ejemplo, te encuentras con políticos con una formación solida y con una buena oratoria, pero esa versión de ellos siempre es mejorable y se puede pulir. El viejo dilema de determinar si el buen comunicador nace o se hace, yo pienso que es un poco de los dos porque naces con predisposiciones que luego tienes que trabajar más adelante y desarrollar, de lo contrario el musculo no alcanza su potencial y se atrofia. Esas predisposiciones con las que naces y se ven influenciadas por el ambiente social, yo le llamo comodidades o zonas de confort, te sientes cómodo o incomodo cuando tienes que hablar en público, así de simple. No son todos los que se sienten con pez en el agua a la hora de dirigirse a una audiencia. Debes de lograr que tu candidato internalice la idea de que él o ella es la persona que conoce el tema en ese momento y que la audiencia está más asustada porque no lo conoce tanto como el comunicador. La seguridad es un factor básico. Puedes conocer el fondo del tema pero si no cuidas la forma, el fondo es inútil, tienes que expresarte con comodidad.
Por otro lado, te encuentras con políticos que con o sin una formación sólida piensan que lo saben todo y ahí tu mayor desafío es el ego mismo del político. Por otro lado, tienes clientes que son disciplinados, siempre piden feedback luego de todo desempeño y siempre están dispuestos a aprender, yo he tenido mucha suerte en ese sentido, me he topado con gente muy humilde y con los pies bien puestos sobre la tierra.
Y las redes sociales, ¿qué papel juegan para ganar elecciones y una vez que se obtiene la posición que sigue?
Cuando la posición se obtiene, al día siguiente reinicia la campana electoral, la campana nunca descansa, porque un boxeador nunca baja la guardia, por tanto la campaña es permanente. En el pasado he dicho que las redes sociales son la nueva plaza pública donde se dan las conversaciones políticas. La campana electoral es una gran conversación, el político trasmite su mensaje y el electorado reacciona y trasmite el suyo propio sin la censura de los medios tradicionales. Un ciudadano de a pie no puede ir con facilidad a un programa a expresarse, pero con las redes se expresa en tiempo real. Un tweet o una foto reveladora publicada por un seguidor puede terminar en un minuto una campaña que lleva un año, incluso toda una carrera política para siempre.
En resumen, la mitad de la batalla se pelea en las redes sociales. Cada red social tiene una audiencia diferente, por tanto necesita un enfoque y abordaje distinto. Facebook es la más grande de todos, no me imagino una persona sin Facebook en estos días. Instagram es una galería de fotografías que está siendo muy popular y Twitter es el ring de pelea donde todos compiten por escribir el pensamiento más reflexivo en una cantidad limitada de caracteres, no concibo un político sin Twitter.
Los comentarios están cerrados.