El comité ministerial israelí sobre Legislación votó a favor de la aprobación de un proyecto de ley que tiene como fin aplicar las leyes del Knesset (el parlamento israelí) para los judíos que viven en asentamientos judíos en la Ribera Occidental y en Jerusalén Oriental.

El proyecto de ley, presentado por los miembros del parlamento Yariv Levin (del Likud) y Orit Struk (de Casa Judía) trata de aplicar por igual las leyes israelíes en los asentamientos judíos ubicados más allá del límite previo al año 1967, en tierras anexadas por Israel durante la Guerra de Medio Oriente de ese año.

Hoy en día, hay 16 leyes existentes que se aplican para asentamientos en la Ribera Occidental, legisladas por el Knesset, incluyendo la ley de pena de muerte, del servicio militar obligatorio, así como varias leyes impositivas.

De acuerdo con el nuevo proyecto de ley, estas leyes serían aplicadas a través de un decreto militar, marcando una implementación de la soberanía israelí en esos territorios de la Ribera Occidental. Seis ministros votaron a favor de la propuesta, mientras que otros cuatro votaron contra ella. La ministro de Justicia y ex jefa de negociadores con los palestinos, Tzipi Livni (del Hatnua) anunció que ella apelaría la decisión.

El comité ministerial discute los temas judiciales y de aplicación de la ley, y es responsable de establecer la posición gubernamental con respecto a las leyes propuestas. De acuerdo con las regulaciones gubernamentales, si un ministro apela la decisión, a menos que el gobierno decida de otra manera, entonces la decisión del comité se declara como nula y el gabinete se le opone. Si la propuesta de ley entra en vigencia, el Comando Central de las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) tendrá 45 días para emitir un decreto, equiparando las leyes promulgadas en los asentamientos judíos de la Ribera Occidental, a aquellas del territorio israelí precias al año 1967.

En la explicación de esta propuesta, los ministros hicieron notar que “en la Ribera Occidental hay 350.000 ciudadanos israelíes quienes votan para el Knesset, pero sus vidas no son manejadas por él, ya que la ley israelí no se aplica aquí. Esta inaceptable realidad daña nuestra dignidad, hiere nuestros derechos y discrimina contra ellos”.

El líder del izquierdista Meretz, Zehava Galon, criticó el proyecto de ley, llamándolo “una cancerosa combinación de anexión y apartheid”. “Implementar la ley israelí es anexar de facto los territorios ocupados, y el hecho de que solo se aplica a los colonos judíos que viven en la Ribera Occidental, crea discriminación racial” dijo Galon en una declaración.

En septiembre, el gobierno israelí anunció su decisión de anexar cerca de 1.000 acres de tierra en el bloque de asentamientos Gush Ezion de la Ribera Occidental. El gobierno también dio el visto bueno para que sean construidas miles de unidades habitacionales en la Ribera Occidental y Jerusalén Oriental en los meses recientes.

Israel está enfrentando una reacción diplomática negativa respecto de su política de asentamientos y ha sufrido un golpe grande cuando Suecia anunció recientemente su reconocimiento del estado palestino, convirtiéndose así en el primer país importante de Europa Occidental en hacerlo. Además, existen iniciativas para prohibir los productos de asentamientos de la Ribera Occidental y la Unión Europea emitió una resolución el pasado año, hacienda ilegal la cooperación entre compañías basadas en la UE y sus contrapartes israelíes que operan en los territorios ocupados.