El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, anunció este jueves la creación del Ministerio del Posconflicto y designó como titular al general Óscar Naranjo, que forma parte del equipo que negocia desde noviembre de 2012 con las FARC el fin del conflicto armado.
“Su liderazgo y conocimiento en inteligencia y seguridad ciudadana permitirán que alcancemos el modelo de una nueva Colombia en paz, con más seguridad y presencia del Estado en todo el territorio”, afirmó el mandatario en un discurso televisado.
Santos, que asumió la semana pasada su segundo mandato, señaló que Naranjo estará encargado de formular, estructurar y coordinar las políticas y programas relacionados con el posconflicto, así como de asesorarlo para modernizar los modelos de seguridad, desmovilización y reintegración de los guerrilleros que abandonen las armas.
El flamante ministro seguirá como miembro del equipo negociador en Cuba, aunque su participación en la delegación de La Habana estará supeditada a sus funciones en Bogotá. Actualmente la delegación gubernamental dialoga con miembros de las FARC y representantes de la sociedad civil la reparación de las víctimas del conflicto.
El inicio de esta cuarta fase del diálogo, luego de los acuerdos en materia agraria, del narcotráfico y de la participación política, fue tenso, dado que el Gobierno pretendía que los militares fueran presentados como víctimas, mientras que los guerrilleros también se consideraban a sí mismos víctimas del conflicto. Ambas partes identifican al otro como el victimario.
A eso se suma una serie de atentados contra la población que principalmente afectaron la infraestructura del país, dejando ciudades entera sin agua o electricidad. Los guerrilleros también obligaron a que camiones vertieran petróleo en la selva, lo que contaminó el medioambiente, para evitar que proveyeran de combustible otras zonas. “Están jugando con fuego”, les había advertido Santos.
En su discurso, Santos anunció una reestructuración de la presidencia, dando el rango de ministros a puestos que antes eran considerados “altas consejerías”. Así, el presidente colombiano nombró ministro de la Presidencia a Néstor Humberto Martínez; ministra consejera de Gobierno y Sector Privado, a María Lorena Gutiérrez; y ministra consejera de Comunicaciones, a Pilar Calderón.
“Adoptamos una profunda reestructuración de la Presidencia de la República para hacerla más eficaz, más estratégica y más comunicativa”, explicó tras la creación de los cuatro nuevos ministerios.
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