Las tropas ucranianas y los insurgentes que buscan la independencia han comenzado a establecer una zona de amortiguación libre de armas para separar entre sí las áreas que ellos controlan, dijo el lunes un portavoz del ejército gubernamental.

“Los preparativos para la retirada del armamento pesado, están en marcha” dijo durante una reunión informativa Andrei Lysenko, un vocero del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania. Aunque los rebeldes continúan sus ataques contra las fuerzas del gobierno, la intensidad de su ofensiva se ha reducido, dijo él. Lysenko dijo que durante las últimas 24 horas dos soldados ucranianos fueron muertos e igual número resultaron heridos en la confrontación con los insurgentes.

Él agregó que las dos partes continúan el intercambio de prisioneros de guerra, diciendo que los rebeldes han entregado a 28 efectivos gubernamentales a las fuerzas ucranianas durante el último día.

Lysenko dijo que cerca de 1.200 ucranianos, incluyendo soldados y civiles, han sido liberados a cambio de la puesta en libertad de insurgentes capturados.

Bajo los términos del acuerdo alcanzado el sábado en la ciudad capital de Belarus, Minsk, Kiev y los rebeldes acordaron continuar intercambiando prisioneros y mudar su artillería a 15 kilómetros de la línea del frente, para crear una zona desmilitarizada de 30 kilómetros.