El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, visitará Kosovo el viernes para confirmar el apoyo de la Alianza a la estabilidad en la región.
En una conferencia de prensa con Isa Mustafa, el “primer ministro” de Kosovo, Stoltenberg hizo comentarios sobre la posible transformación de la Fuerza de Seguridad de Kosovo (FSK) en un ejército, lo cual es el anhelo de las instituciones de Kosovo.
El dijo que la decisión sobre la FSK es un tema interno de Kosovo, que sin embargo no debe poner en riesgo la estabilidad “del continuo compromiso hacia cualquier esfuerzo que conduzca a la normalización de la situación en el terreno. Y evitar crear tensiones”.
El Secretario General dijo que no depende de la OTAN decidir sobre el futuro de la FSK, y que la Alianza seguirá ayudando a construir una competente Fuerza de Seguridad de Kosovo, durante su actual mandato.
“Una fuerza profesional y competente, y una fuente de estabilidad regional,” dijo Stoltenberg. Él subrayó que la asistencia de la OTAN ayudó a Kosovo y a la región a convertirse en un lugar más seguro, y alentó a las partes a continuar invirtiendo en una dirección positiva.
Además, aconsejó claramente, que cualquier cosa que se decida, debe ser de una manera que no vaya a crear situaciones desagradables, y que no atente contra el progreso logrado.
Transformar la FSK, una fuerza ligeramente armada de 2.500 miembros, en un ejército, es el aparente anhelo de las instituciones de Kosovo, pero para lograr esto, ellos necesitan el apoyo de las 2/3 partes de la minoría de los diputados de la asamblea de Kosovo, a fin de aprobar la legislación correspondiente.
O sea que deben ganarse el apoyo de los representantes serbios, lo cual es poco probable que ocurra ahora, aunque ellos no rechazan vehementemente esta idea. Kosovo declaró unilateralmente su independencia en el 2008. Serbia se rehúsa categóricamente a reconocer esa independencia.
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